Se ha abierto una iniciativa en la que se recogen firmas para pedir al Presidente del gobierno que tenga en consideración el crear un centro para la memoria en parte de las instalaciones de la vieja cárcel de Carabanchel.
Como es bien sabido, la madrileña cárcel de Carabanchel fue uno de los lugares emblemáticos de la represión que el pueblo español sufrió durante los largos años de la dictadura franquista. Entre sus rejas se encarceló, vejó, torturó y asesinó a miles de presos, por sus ideas políticas o sindicales, por sus preferencias sexuales o víctimas en general de los humillantes y antidemocráticos códigos y leyes represivas. No fue el único lugar, pero sí de los más tristemente conocidos nacional e internacionalmente, y cuyos muros todavía se mantienen en pie, a la espera de un futuro más positivo para los vecinos.
Son numerosos los países que, habiendo sufrido los rigores de regímenes dictatoriales, han dedicado algunos de sus centros de tortura y exterminio como muestras vivientes de lo que nunca debe volver a ocurrir. La Alemania de Hitler, la Italia de Musolini, el Portugal de Salazar, el Chile de Pinochet, la Argentina de Videla, la Sudáfrica de Botha, etc. son algunos de los países en los que no se han destruido del todo los vestigios de un pasado abominable, y hoy se han convertido en lugares de recuperación de la memoria histórica nacional y mundial, y donde rinden honores los jefes de estado en sus visitas.
Consideramos que la represión sufrida por el pueblo español a lo largo de casi 40 años, por una de las dictaduras más largas y sanguinarias de la reciente historia mundial, requiere que se le dedique un espacio físico para su recuerdo. La cárcel de Carabanchel reúne los requisitos mencionados, y ahora que se decide el destino final de sus terrenos, es una inmejorable oportunidad para que no se destruya todo lo que simbolizó aquel siniestro lugar.
Los vecinos de la zona, de Latina y Carabanchel, con una población que supera los cuatro millónes de habitantes, y que soportaron durante décadas el estigma de aquel centro, demandan, en su larga lucha por conseguir el uso social de los terrenos, la construcción de un hospital y la creación de este centro de la memoria y la paz, habiendo presentado al efecto un proyecto. El éxito de la reciente exposición sobre la cárcel avala este apoyo vecinal. E incluso el partido que Vd. dirige presentó en su día un proyecto de características similares.
Por todo ello solicitamos que parte de las instalaciones de la antigua cárcel de Carabanchel se destinen a crear un centro y museo de la memoria, de la paz, de la convivencia y del respeto a los derechos humanos, valor universal consagrado en la Declaración de 1948.
Yo he crecido en Carabanchel, el director de mi colegio era carcelero de este centro penitenciario durante el franquismo, incluso venía al colegio con el uniforme. La cárcel siempre fue un estigma para el barrio, desde casa se oían los motines y desde casa oímos los pitidos de los coches cuando liberaron a los presos políticos. Como carabanchelero me parece justo que este edificio lave su imagen convirtiéndose en un centro para la memoria.
Si compartes la iniciativa, firma la carta al Presidente.
Saludos Progresistas.
Filed under: Memoria Historica | Leave a comment »